El perder peso va ligado a la limpieza y desintoxicación del organismo.

Para este fin, existen en la naturaleza una variedad frutas y verduras muy aconsejables, pero, hay una una manera de lograrlo en particular, que se destaca sobre las demás por su alto nivel de efectividad sin dejar de ser 100% natural.

Por si no lo sabías, la berenjena puede aportarnos una excelente solución al sobrepeso, estreñimiento y otros problemas intestinales y digestivos gracias a sus generosas propiedades antioxidantes, diuréticas y depurativas , a la vez que contribuye enormemente a la desintoxicación del organismo por sus altas concentraciones en fibra.

Generalmente, la consumimos en forma de guisos, en ensaladas y  escabeches,  y aunque existen decenas de ricas y deliciosas recetas y modos en que puede prepararse, te enseñaremos la forma efectiva de usarla con fines de rebajar y de limpiar nuestros intestino .

AGUA DE BERENJENA PARA LIMPIAR TUS INTESTINOS Y BAJAR DE PESO

A CONTINUACIÓN TE MOSTRAREMOS COMO PREPARAR AGUA DE BERENJENA:

Ingredientes que necesitarás:

1 berenjena

1 limón

1/2 litro de agua.

Como prepararla:

Lava bien la berenjena que vas a usar , luego córtala en cubos sin quitarle la cáscara e introdúcela en una jarra o recipiente de vidrio, El siguiente ingrediente que agregarás será el limón cortado en rodajas y por último vierte el medio litro de agua.

Deberás llevar esta preparación al refrigerador y lo dejarás reposar de un día a otro para que la berenjena y el limón desprendan sus nutrientes en esta agua.

FORMA DE USO

Al día siguiente estará lista para tomar. Lo recomendable es tomar esta bebida en ayunas al levantarte y antes de almorzar para aumentar la efectividad de los resultados.

De igual forma, si lo que buscas es desintoxicar el cuerpo y bajar de peso se recomienda beber esta preparación durante siete días corridos y repetir el proceso una vez por mes.

Como en toda dieta, el agua de berenjena solo te brindará resultados positivos si la acompañas por hábitos saludables como consumir vegetales y frutas, beber abundante agua, evitar los alimentos grasos, ricos en carbohidratos, frituras, gaseosas y hechos con harina y sobre todo, hacer ejercicio.